Trae la brisa suave
mensajes de algún
rincón.
Caricias para la mente
alimento al corazón.
Vienen despacio
sin prisa,
se quedan y no se van.
Arrullan sueños
lejanos
invitan a la oración.
Y despacio, muy
despacito
se hacen eco en una
canción.
Fotografía: https://chronosfer.wordpress.com/