domingo, 2 de abril de 2017

Infinitos verdes



Me deslumbra la infinidad de matices que la naturaleza nos regala…































Gigantes


Majestuosos, protectores, desafiantes.
Cobijo de las aves y del hombre.
Estoicos, ancestrales,
escondite de la lluvia y del sol.

Aferrados a la tierra,
pretenden llegar al cielo.
Se mecen con placer
con la briza matinal.
Rugen con dolor
ante el viento despiadado.

Pero siempre de pie,
Siempre erguidos,
Siempre esperando la muerte
con la altiva humildad de los grandes.

Porque don Alejandro Casona
tenía razón…
Los de buena madera, como los árboles,
mueren de pie.